Read me?

Tener miedo y sentirte poderosa, creer que puedes volar y no querer despegarte del suelo. Te miras al espejo y te ves hermosa, das la vuelta y tu reflejo te espanta. Subí al micro esa tarde porque necesitaba viajar, 30 minutos en un bus; parada o sentada, solo quería viajar.  El viento me dio en la cara y me encanto la sensación, hasta me reí.  "Toda la mañana la había pasado hecha un capullo, sintiéndome frágil y sola.  - ¿Que tienes?- me preguntó mi hermana. - No me preguntes ¿quieres?  - Ay! - chasqueo los dientes - de verdad no sé porqué te tienes que poner en ese plan. - No fastidies ¿quieres?- le respondí y caminé mas rápido para deshacerme de ella; era fácil, a ella no le gustaba caminar rápido.  "¿Porque la traté mal? En realidad quería decir cualquier pachotada y hacerla reir, era mi hermanita. Pero quería que se de cuenta que estaba enojada" Disminuí la velocidad y finalmente me alcanzó.  -¿ Vas a demorarte tanto? - le grite - Si estas enojada no

Me senté en la banca que tanto me gustaba frente al mar. Recordé que a pesar del tiempo esa banca había permanecido ahí siempre, en el mismo lugar, en la misma dirección. Y no había porque desesperarse o asustarse por perderla, la banca seguiría ahí unos cuantos años mas; si es que no era para siempre. Y yo también, yo también. Hoy era momento de sentarse en la banca y leer, soñar tal vez; mañana podría ser que decidiera acostarme a descansar y mirar el precioso cielo azul. Quizá unos años después, pasear y retozar en aquella banca no sería un paseo tan silencioso y solitario, y... ¿Quien sabe?   Por ahora solo disfruto del sol en la cara la tibia sensación de esos  rayitos de placer que me causan el saberme en paz. 

Un momento, un segundo; todo puede ser distinto. El problema esta cuando quieres cambiar ese momento, cuando se te ocurre torcer ese segundo. A veces llegas tarde, otras es demasiado pronto y existe la ínfima posibilidad de que te equivoques de tiempo; pero probablemente haya una. Que llegue en el momento indicado y sonría, sea feliz por todos esos y esas que soñaron con una oportunidad. Seamos honestos; uno puede intentar cambiar lo que sucederá, pero lo que ya esta pasando... es bastante improbable.  Así que porque no dejamos que el destino corra en paz, quizá y si somos buenos llegue el momento en que la jugada sea nuestra, quizá, y si somos buenos.

La motivación en estos tipos de situación es definitivamente importante, y me refiero a que si no sueñas, no te mueves; o por lo menos eso me dijeron a mi. El punto es que yo empecé a soñar hasta despierta; lo que trajo consecuencias: millones de vasos, platos, jarras y hasta floreros hechos trizas . ¡Camina con cuidado! Me gritaban antes de salir a la calle, y mi mama temía mas que me atropellaran a que me asaltaran. Pero nunca pasó. Y poco a poco fui olvidándome de imaginar para empezar a recordar el lugar de la vajilla . 

Digamos que sonríe, te mira y para bien tuyo esquivas la mirada; parece que hasta el techo es mucho mas interesante, y lo es. Parece que no tienes como escapar de ti misma, te tortura la idea de que no te mire y por otro lado ¿Porqué te mira? El auto-desprecio comienza su tarea y caes en la cuenta que hace dias que no te presta atención. Obvio. Te has vuelto rutina también, pero quién sabe; mañana es otro día y quizá, tan solo quizá mañana vuelvas a encontrar que te sonríe y busca encontrarte como antes

Me senté bajo la sombra de una palmera. Ha sido un día curioso, desperté sin saber que ahora estaría sentada mirando el agua en movimiento, y el sol decir adiós. No sé cual es sea la  sensación correcta, solo sé que no entiendo nada. Juguetear con la arena me hace sentir viva. Es raro. Un pequeñito quiso jugar conmigo mientras ella hablaba por teléfono. Paseaba junto a su madre y su papá y el abuelo iba también a su lado, apoyándose en un bastón conversaba con su hijo. Hasta pude imaginarme que escuchaba lo que hablan. Por mientras yo sigo dando vueltas en el juego; veo mis pies impulsando el aparato de metal, me encanta. Veo al pequeñín hacer un esfuerzo por subir, no lo ayudo, solo lo animo con la mirada. Me resulta encantador y a pesar de lo mal que me siento le regalo una sonrisa. Sus rulos castaños se ven tiernos, alborotándose sobre su cabeza; tiene los ojos azules y sus pequeñas zapatillas son casi la tercera parte de mi pie. Aún así me quiere ayudar a empujar. Conseguim

Me perdí asustada, con miedo de seguir creando historias. Mi cabeza era un sin fin de creatividad y creí por un momento que nunca pararía. Pero también era fantástico, quiero decir; podía arreglar encuentros, frases, palabras, diálogos y hasta finales. Ese era el truco, encontrar la forma de calmar el fluido de palabras que mi cabeza emitía a borbotones y solo dejarla ser cuando fuera necesaria. "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad" dijo el tío de Peter Parker; pues bien, he ahí un gran poder: La Imaginación; y tenia que aprender a controlarla para no vivir soñando.

Te tengo disperso pero junto, te tengo imaginario y real, te tengo presente y ausente. Pero te tengo ¿que tengo? Tengo tu respiración, tengo tus bromas, tengo tus sueños, pero a ti no te tengo. Robé instantes de mi sueño, robé minutos de soledad, hasta robé segundos de mi silencio; pero a ti, no te robe. Te robe la sonrisa pero no la risa, te robe una mirada pero no amor, te robe palabras y ninguna promesa. Pero te robe; ¿Te robe?