La motivación en estos tipos de situación es definitivamente importante, y me refiero a que si no sueñas, no te mueves; o por lo menos eso me dijeron a mi. El punto es que yo empecé a soñar hasta despierta; lo que trajo consecuencias: millones de vasos, platos, jarras y hasta floreros hechos trizas . ¡Camina con cuidado! Me gritaban antes de salir a la calle, y mi mama temía mas que me atropellaran a que me asaltaran. Pero nunca pasó. Y poco a poco fui olvidándome de imaginar para empezar a recordar el lugar de la vajilla.
Juguemos a que vienes, Juguemos a que me voy Juguemos como hemos hecho desde el día que nos conocimos. Juguemos a que me escuchas y yo te devuelvo el favor. Sonriéndote desde siempre y tu olvidándote de mi. Juguemos a que de verdad te importa, Juguemos ese juego doloroso que llevamos jugando tanto tiempo. Ese en el que tu apareces y yo vivo, ese en el que tu me dejas y yo lloro. Me he escondido un buen tiempo y no has venido a por mi. Te dejé las pistas en ese corto camino que caminamos un par de veces, te deje el lugar en esa escasa mirada que me regalaste algún día, te dejé un letrero enorme hecho de esas horribles migajas con las que fui feliz. Tu decidiste no buscarme, tu decidiste mirar para atrás tu decidiste cansarme e irte a lo mas fácil. Juguemos a que quizás te diste cuenta, juguemos a que no te atreviste por miedo, por timidez.. Juguemos este juego en el que tu y yo sabemos que ya perdí.
Comentarios
Publicar un comentario